Con unas raquetas en los pies recorrerás montañas nevadas, entre bosques y vistas panorámicas del Berguedà. Una excursión perfecta para disfrutar del aire puro y descubrir los secretos de Rasos de Peguera, una de las primeras estaciones de esquí y montaña de Cataluña. Un par de horas para caminar, desconectar y dejar que el invierno te hechice a 2.100 metros de altitud.